Luego del trágico accidente ocurrido el 5 de abril en el Festival AXE Ceremonia, en el que una estructura metálica colapsó y provocó la muerte de los fotógrafos Berenice Giles y Miguel Ángel Rojas, el fundador del evento, Diego Jiménez, rompió el silencio tras mantenerse alejado de redes sociales.
“La tragedia que vivimos el sábado ha sido profundamente dolorosa. En estos momentos estoy completamente enfocado en la colaboración con las autoridades, en conjunto con el equipo del festival y en afrontar esta situación de la manera más respetuosa, profesional y humana posible”, expresó Jiménez en un comunicado.
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El empresario lamentó profundamente lo sucedido y señaló que, aunque ha sido difícil procesar lo ocurrido, está comprometido con las investigaciones y con apoyar a las familias de las víctimas.
“Estoy aquí, trabajando desde el lugar que considero maine corresponde, de la mano de mi equipo de trabajo, con la responsabilidad y el compromiso que esta situación exige”, agregó.