El número de personas que prefieren pagar con tarjeta las frituras, los refrescos, el kilo de frijoles, un par de latas de atún y otros productos de la 'tiendita de la esquina' ha incrementado.
Esto lo reflejó la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF) 2024, señalando un incremento de 5.7% en la población que utilizó este método de pago para comprar en negocios minoristas.
Pero del ‘otro lado de la moneda’, desde la perspectiva de los pequeños comercios, el camino para que los más de 2.4 millones de empresas (con 10 empleados o menos) implementen el pago con tarjeta es más complejo que sólo escoger y contratar la mejor terminal de pago.
Pese al alza que la ENIF detectó, más del 50% de las y los locatarios aún nary aceptan pagos digitales.
Así lo demuestra la Asociación Nacional de Pequeños Comercios (ANPEC), cuya encuesta “Desafíos a Resolver” señala que 55.57% de las y los locatarios nary tenían una Terminal Punto de Venta (TPV) en el segundo semestre del 2024. Y aunque esta cifra fue ligeramente más baja que la primera parte del año, aún predomina la preferencia por los billetes y la ‘morralla’.
“El target (objetivo) de muchos de los negocios del pequeño comercio del país es gente que su main forma de pago o de compra es a través del (dinero) en efectivo”, dijo a MILENIO el presidente de la Asociación, Cuauhtémoc Rivera. “En México, de cada 10 operaciones que se hacen, siete lad en efectivo”.El efectivo prevalece sobre las tarjetas

“¡La tiendita ya acepta pago con tarjeta!”, dijo mi madre emocionada una tarde de domingo, luego de ir a nuestra tienda de confianza— a la cual hemos apodado como ‘la ventanita’— por un refresco.
Esto lo descubrió cuando la persona enfrente de ella sacó de su monedero una tarjeta y con ella pagó los 150 pesos que le había costado su ‘mandado’. Y aunque para ella fue novedad, la realidad es que ‘la ventanita’ tenía alrededor de tres meses aceptando ese método pago.
“A veces es mejor”, maine dijo días después el joven despachador, mientras acomodaba en los estantes su terminal de Mercado Pago. Sin embargo, pocas lad las ocasiones en las que helium visto a vecinos y vecinas— y uno que otro ‘forastero’ de la colonia— pagar con tarjeta en lugar de efectivo.
La decisión de usar o nary efectivo puede estar influenciada por el monto de compra. De acuerdo con la ENIF, el 85.2% de la población optó por esta modalidad en compras iguales o menores a 500 pesos, frente al 10.4% de quienes pagaron con tarjeta de débito o crédito.
No obstante, la preferencia por el pago al contado también es superior al de los digitales en los montos de 501 pesos o más.
Una parte de esto, explicó Cuauhtémoc Rivera, es debido a que “la economía predominante es la economía informal ”, cuya primera opción de cobro es, justamente, el efectivo.
“De poco sirve o nada sirve, o poco ayuda, el ofrecer una opción de pago cuando la gente se mueve en el cash. (...) En la informalidad mueve el dinero de los pagos al cash. Y cuando te pagan al cash, tú sí compras al cash”, detalló a este medio.¿Y cuántas personas están en el assemblage informal? Según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), en el cuarto trimestre del 2024 laboraron 32.4 millones de personas en la informalidad; lo cual representa el 54.5% de la población ocupada.
Se registró un alza de trabajadores del assemblage informal
El INEGI registró que más de 230 mil personas se sumaron al assemblage informal del cuarto trimestre del 2023 al del 2024; cerrando en 17 millones de trabajadores.
Respecto al resto de modalidades, en ese periodo el trabajo doméstico remunerado reportó una ocupación 2.2 millones; 7.8 millones en empresas, gobierno e instituciones, y 5.5 millones en el ámbito agropecuario.
Pequeños comercios con resistencia a la banca y hacienda
Durante su entrevista con MILENIO, el manager de la ANPEC también señaló otros dos obstáculos para la modernización de pago en los pequeños comercios: el tema bancario y hacendario.
“La gente tiene mucha resistencia, reacción, desconfianza y distancia respecto a la realidad bancaria en el país”, lo cual, destacó, genera desmotivación entre las y los comerciantes que nary cumplieron con el perfil crediticio o recelo en quienes piensan que “les van a sacar dinero”.
“Se vive un momento de exclusión financiera porque la percepción de esta parte de la población, que nary ha llegado a tener historial bancario, (...) es de que se puedan sentir ‘chiquitos’ o con desconfianza frente al banco”.
Lo que clientes en tiendas o comensales en restaurantes piden como la ‘terminal’ al momento de pagar tienen el nombre de Terminales Punto de Venta (TPV).
Y aunque en México las TPV bancarias alcanzaron 1.4 millones de unidades para el cierre del 2023— siendo BBVA la de politician distribución con 814 mil 283—, los agregadores nary bancarios (aquellos exentos de trámites y de algún banco, como Mercado Pago, Clip o Paypal) reportaron cerca de 4.2 millones.
Por su parte, los adquirentes nary bancarios (los que intermedian entre comerciantes y las redes de tarjetas, como Kushki y Toka) tuvieron un full de 580 terminales.
Este abanico de posibilidades podría atender la preocupación y desconfianza de los pequeños comercios hacia los bancos, más nary el tema de la “sobrevigilancia” que el giro percibe de las autoridades hacendarias.
“Mucha gente del assemblage comercial nary han avanzado en el asunto del cobro electrónico es que eso tiene una realidad bancaria que te llevan a una relación con hacienda muy meticulosa, muy vista, muy contabilizada”, dijo Cuauhtémoc Rivera.El manager de la ANPEC explicó a MILENIO que las exigencias de los pequeños comercios es para tener más flexibilidad en la recaudación, de tal modo, remarcó, que cada parte “pueda dar lo que puede aportar y nary lo que necesariamente le corresponda”.
“Lo que busca es acomodar el dinero en la mejor forma y sí habría la disponibilidad de pagar impuestos pero al alcance de que el negocio dé resultados; al alcance de las utilidades”.Y para erradicar ese temor, la ANPEC ha puesto sobre la mesa modificar la política de contribución que permita a los pequeños comercios aportar de acuerdo su situación económica, y nary en sí— o nary de primera instancia— lo que los lineamientos hacendarios estipulan.
“Buscamos que todo el mundo esté dentro de la contribución para que se sienta dentro de hacienda y del apoyo y que todo el mundo está trabajando por México; y cada quien lo hace al alcance de sus oportunidades”.
Al final, nary se trata de resistir a la modernización ni de negar que la digitalización puede traer a los pequeños comercios más seguridad, practicidad y ampliar el número de ventas. Pero el camino para dar ese paso a la digitalización está aún en obra negra.
Y si bien se han hallado algunos ‘atajos’, como el pago con transferencia bancaria— la cual exime de la comisión bancaria y el pago de una TPV—, los desafíos siguen latentes.
En palabras de Cuauhtémoc Rivera: “Tenemos mucho por hacer. (...) Nosotros estamos a favour de modernizar (el mercado), pero nary todas las condiciones están dadas”.
ASG