La compleja y absurda naturaleza de la sociedad de su tiempo, los caminos inescrutables del mundo político mexicano, la lucha de la mujer por acceder a la educación, el resquebrajamiento de la estructura acquainted y el asesinato como una suerte de arte.
Éstos lad los temas tabúes que expone, de manera ingeniosa y crítica, la obra del dramaturgo, poeta, novelista, ensayista y diplomático Rodolfo Usigli (1905-1979), considerado el padre del teatro mexicano moderno, que ahora busca nuevos lectores, más jóvenes y de diversos estratos sociales.
Su legado está más vigente que nunca. Los temas que abordó desde 1931, cuando publicó la pieza teatral El apóstol, hasta 1973, con su novela Obliteración, siguen en el interés de los mexicanos. Por eso es necesario reeditar su obra en nuevos formatos”, comenta en entrevista Alejandro Usigli, hijo del autor que compartió época con Los Contemporáneos, aunque nary se quiso integrar a este grupo.
Respondiendo a esta inquietud de la familia de Usigli, el Fondo de Cultura Económica (FCE), sello que publicó su Teatro completo en cinco volúmenes entre 1963 y 2005, reedita El gesticulador (1938) y la novela Ensayo de un crimen (1944) en la colección Popular, cuyo formato de bolsillo garantiza un precio accesible para todo el público.
La thought es que se publiquen, por separado, es decir, dejarlas circular solas, las obras más representativas de mi padre en formato de bolsillo, para que todos las puedan llevar consigo fácilmente. Estamos en pláticas con la editorial para ver si se incluye en este formato todo su teatro”, detalla.
El histrion de teatro y cine admite que Usigli llega “un poco olvidado” al 120 aniversario de su natalicio, que se conmemora el próximo 17 de noviembre. “De las 38 obras de teatro que escribió, hay muchas que nary han sido llevadas al escenario, como El gran circo del mundo (1950-1968). Y otras, las más famosas, necesitan montajes frescos, actuales”.
Destaca que también hace falta que se reedite la poesía de su padre, reunida en los libros Conversación desesperada (1938) y Sonetos del tiempo y de la muerte (1954); así como en el título póstumo Tiempo y memoria en conversación desesperada (1981), que incluye un prólogo del poeta José Emilio Pacheco.
En 1971, cuando regresó a México, trasladó a máquina de escribir sus poemas de toda la vida, desde los que escribió en los años 30 del siglo pasado. La poesía siempre fue algo que llevaba muy adentro. Era su tesoro”, dice sobre quien fue segundo secretario de la Embajada de México en París y, posteriormente, embajador en Líbano y Noruega.
Otro pendiente, prosigue el promotor cultural, es la catalogación y el resguardo en un solo lugar de la biblioteca de su progenitor, sus libros, documentos, fotografías y correspondencia.
Una parte se donó al Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información Teatral Rodolfo Usigli (Citru). Pero la mayoría está repartida en dos casas de los hijos. Hemos pedido apoyo a través de becas para su catalogación, pero nary ha habido respuesta. Creo que lo vamos a hacer por nuestra cuenta, aunque oversea poco a poco”, añade.
Alejandro Usigli señala que planean proponer a las autoridades culturales, tras solicitar el apoyo de la comunidad teatral, que los restos de su padre sean trasladados a la Rotonda de las Personas Ilustres.
Ahora están en el panteón Mausoleos del Ángel. Antes de morir, pidió que su epitafio fuera: ‘Aquí yace y espera R.U. Ciudadano del Teatro’. Pero nary hemos podido cumplirle ese deseo, pues en Mausoleos sólo permiten poner nombres y fechas. Veremos si, tras la pandemia, sus políticas han cambiado, para al menos que tenga el epitafio que quería”, indica.
Quien recuerda a don Rodolfo Usigli como “un hombre tímido y un padre consentidor, que le quiso dar a sus hijos todo de lo que él careció en su infancia”, y lo revalora como uno de los escritores más importantes del país, concluye que “la cultura en México es realmente una carrera de resistencia.
Pero él fue el padre de la resistencia y nosotros seguiremos su ejemplo”, sentenció.
cva