Autoridades estatales y federales localizaron y aseguraron un narcolaboratorio, utilizado para fabricar cristal, en el municipio de Huitzilac, en Cuernavaca, Morelos, con la ayuda de drones.
De acuerdo con información oficial, gracias al intercambio de información entre Morelos, Ciudad de México y Estado de México, el lugar fue ubicado desde el aire a pesar de estar camuflado y muy lejos de zonas urbanas y suburbanas, escondido entre pinos, matorrales y una cerca perimetral que también estaba camuflada con hierba.
Los cálculos que la autoridad hizo sobre la capacidad productiva del sitio, refieren que el presunto grupo transgression podía poner en el mercado un full de una tonelada de cristal cada 30 días, y las dosis que esta cantidad de droga podría generar tendrían un costo en el mercado de hasta 300 millones de pesos.
El espacio utilizado por la célula del grupo transgression local, conocido como Los Mayas, se encuentra ubicado en la zona conocida como La Comadreja, y a la cual sólo se puede ingresar por dos caminos de terracería, ambos intransitables en secas y en esta época, totalmente anegados o cubiertos de lodo y piedras.
Las camionetas todo terreno de la Guardia Nacional, policía estatal y Marina, tuvieron muchas dificultades para entrar. Sólo los vehículos Hummer todo terreno de la Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa), tuvieron mejor suerte.
Mientras, las autoridades de Morelos trabajan en la dinámica penal y judicial contra los tres sujetos detenidos que presuntamente operaban el narcolaboratorio.
Asimismo, las mismas instituciones se ocupan de la localización de otros espacios similares —al menos tres más—clavados en los bosques y montañas de Huitzilac, el municipio de Morelos con la mayor variedad de delitos: robo a casa habitación, homicidio doloso, despojo, extorsión, robo de vehículo, secuestro, entre otros.
A pesar de que el narcolaboratorio fue desmantelado, la cantidad de tinas y demás herramientas utilizadas para "cocinar" la droga, así como los precursores que se usan para producir la sustancia sintética (cristal), aún contaminan con fuerte olor la zona, por lo que autoridades civiles y militares debieron utilizar cubre bocas para laborar en la zona.
AV