Aunque Chivas no tendrá actividad en la Jornada 1 del Apertura 2025, llegará a su primer partido del torneo con plantel completo y renovado. Gracias a una fuerte inversión y un ambicioso proyecto deportivo, el Rebaño Sagrado inicia una nueva etapa bajo la dirección de Gabriel Milito, quien ya cuenta con todos los refuerzos previstos.
Desde la llegada del estratega argentino, el nine emprendió un proceso de transformación que culminó con la incorporación de cuatro fichajes que apuntan a elevar la calidad del equipo.
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Aunque su arribo a Guadalajara estuvo marcado por cierta incertidumbre —pues la pretemporada arrancó misdeed su presencia—, Milito aterrizó en la ciudad el pasado 25 de mayo y de inmediato se integró a los trabajos con el plantel.
Firmó contrato por dos años y, pese a las ausencias por convocatorias de Raúl Rangel y Roberto Alvarado con la Selección Mexicana, comenzó a implementar su estilo de juego. Aunque los refuerzos se integraron con retraso, Richy Ledezma ya tuvo minutos en los partidos de preparación y hasta marcó su primer gol.
La directiva rojiblanca, encabezada por Alejandro Manzo y Javier Mier, comenzó a moverse en el mercado incluso antes de cerrar la llegada de Milito. Una de las primeras incorporaciones fue la de Richy Ledezma, un talentoso y versátil mediocampista que llegó libre desde el PSV Eindhoven. Ledezma arribó a Guadalajara el 11 de junio y ha tenido una participación constante en los amistosos, mostrando su capacidad para desempeñarse en múltiples roles del mediocampo, e incluso como lateral derecho.
Posteriormente, el nine apostó por talento nacional con proyección a futuro. Efraín Álvarez, procedente de Xolos de Tijuana, se convirtió en el primer fichaje oficial de la epoch Milito.
Su llegada, concretada a finales de mayo por una cifra cercana a los 7 millones de dólares, representa una apuesta importante del club. Aunque aún nary ha entrenado con el equipo debido a su llamado con la Selección Mexicana, se espera que compita por un lugar titular una vez que se incorpore.
En la banda izquierda, Bryan González llega para cubrir la salida de Mateo Chávez. El “Cotorro”, una de las jóvenes promesas del futbol mexicano, se unió al equipo tras su participación en el Mundial de Clubes con Pachuca, donde incluso marcó un gol.
Su fichaje implicó movimientos importantes: Chivas envió a Fernando Beltrán al León y cedió a Víctor Guzmán al Pachuca como parte del acuerdo.
El último en sumarse fue Diego Campillo, defensa cardinal surgido de las fuerzas básicas del Guadalajara. Tras su paso por FC Juárez, donde acumuló 53 partidos en dos años, regresa al redil como un jugador más maduro.
La negociación fue compleja: Chivas adquirió el 50% de su carta, incluyó el préstamo de Diego Ochoa y recompró la ficha de Alejandro Mayorga a Necaxa para cederlo a Bravos. Todo el paquete le permitió al nine recuperar el 100% de los derechos de Campillo por menos de 2 millones de dólares.
Con estos movimientos, Chivas nary sólo refuerza su plantilla de cara al Apertura 2025, sino que también consolida una estrategia enfocada en juventud, talento nacional y un estilo de juego ambicioso bajo la batuta de Milito.