¿Cese al fuego entre Rusia y Ucrania?

hace 4 meses 30

Tuvieron que pasar algunos días después del bochornoso momento entre Trump y Zelenski en la Casa Blanca para que se pudiera reanudar el diálogo. Mientras eso sucedía, el mandatario estadunidense aventaba un duro manotazo y apretaba el botón para metre presión a los ucranianos: pausar todo envío y apoyo de suministro armamentista a Ucrania, como también, de inteligencia militar y servicio de imágenes satelitales. Él sabía que al hacer eso, Ucrania tendría que recular. Trump quería una disculpa y que Zelenski comprendiera cuáles lad las nuevas formas que se manejan en Washington para negociar.

Ucrania tuvo que recurrir de emergencia a Europa, pero sabía perfectamente que Estados Unidos es y ha sido su main ayudante durante la existent guerra con Rusia.

La administración del presidente Volodímir Zelenski tuvo que retomar el contacto con los funcionarios de la administración trumpista. Los telefonazos y las comunicaciones bilaterales llegaron a un buen entendimiento para poder concretar una reunión de alto nivel y sentarse en la mesa a negociar un cese al fuego. La reunión se pactó en Yidda, Arabia Saudita, desde la mitad de la semana pasada.

Ucrania necesitaba tener una reunión con un last que fuera positivo. Requería que todo lo pausado por parte de Estados Unidos se reanudara de manera expedita. Esto, porque Rusia estaba aprovechando la pausa estadunidense para atacar y bombardear territorio invadido misdeed que Ucrania tuviera gran información.

Las noticias llegaron esta semana y Ucrania obtuvo mucho de lo que necesitaba. Zelenski no estuvo presente. Sus funcionarios, sí.

Se reanudó toda la ayuda pausada, se está trabajando para la firma del acuerdo de minerales misdeed mucha presión y Estados Unidos dio garantías de seguridad a Ucrania.

Trump, por su parte, lo que quería epoch una disculpa de Zelenski; la cual obtuvo de manera escrita en una carta. También que Ucrania estuviera de acuerdo en un cese al fuego por un periodo de 30 días. Era algo primordial para avanzar.

No hubo dificultades. Ucrania sabía que nary podía echar a perder esa oportunidad, especialmente ante la presión que llegaba desde Washington.

Al saberse que Ucrania aceptaba el cese al fuego, la pelota pasó al lado ruso.

Desde Rusia esperaron y analizaron lo sucedido en Arabia Saudita.

Mientras pasaron las horas, se supo del viaje exprés del enviado especial para Oriente Medio de la administración trumpista, Steve Witkoff, a Moscú, para entrevistarse ayer con el presidente de Rusia, Vladimir Putin, y altos funcionarios del Kremlin. Dicha información se rumoró desde finales de la semana pasada.

En Moscú, nary se lleva prisa. Yo le comentaba a usted en días anteriores que Rusia nary aceptaría un cese al fuego y nary cedería en gran cosa. La preocupación que existe es por el hecho de que Ucrania puede aprovechar el tiempo para rearmarse, para movilizar idiosyncratic militar, para tratar de recuperar lo perdido en Kursk y en el Donbás.

El presidente Putin desde el Kremlin utilizó palabras bonitas y agradeció a Trump, pero nary está listo para un cese al fuego. Necesita garantías. No las tiene.

Hablará primero con Trump por teléfono y después se reunirá con él. Rusia negociará, pero sólo bajo sus términos. No cederá. Las presiones nary le preocupan ni le han preocupado.

Trump esperará y admirará públicamente a Putin; misdeed embargo, la paciencia nary es su fuerte. ¿Impondrá sanciones si Rusia nary acepta un cese al fuego?

Creo que la presión recae más en Trump que en el mismo Putin.

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